INGREDIENTES:

• Ajo
• Cebolla
• Aceite de oliva
• Orégano 
• Laurel
• Pimienta
• Pimentón en polvo 
• Comino
• Sal

PREPARACIÓN:

1. Utiliza un recipiente hondo, introduce el pollo entero y agrega todos los ingredientes⁣.

2. Cubre el recipiente con papel transparente y déjalo en la nevera durante 24 horas.⁣

3. Transcurrido ese tiempo, elige una de las siguientes opciones para asarlo: 
   Utiliza el asador a la brasa que tienes en casa: Puedes improvisar, utilizando una varilla de acero para atravesar el pollo con ella. Luego, ubícalo de manera que se sostenga en el asador y gíralo constantemente. También, puedes poner el pollo directamente en la parrilla

4. Elige el horno: Es perfecto para conservar la jugosidad del pollo blanco. En primer lugar, precalienta el horno a unos 100 °C y asegúrate de que tenga calor arriba y abajo.

5. Luego, introduce el pollo en una fuente y déjalo durante 30 minutos. Al retirarlo, extrae los jugos y agrégales algún aliño especial como zumo de naranja o pimentón molido. Aumenta la temperatura a unos 200 °C. Después introduce el pollo con la nueva mezcla sobre él y hornea durante 50 minutos más, hasta que dore por ambos lados.

6. Usa la freidora de aire: Esta alternativa es ideal para que la carne de pollo conserve todo su sabor y la piel se tueste sin quemarse. Recuerda no dejarlo demasiado tiempo para evitar que quede seco.

   ¡Deleita tu paladar con una carne jugosa y sazonada!